A orillas del Duero

La campaña publicitaria del gobierno de España destinada a patrocinar el turismo en la Rivera del Duero se centra en resaltar la faceta más humana y cultural de la zona.

En la primera imagen, destaca el primer plano del rostro de una mujer de edad avanzada con la palabra "belleza" impresa en grandes caracteres sobre ella. Bajo dicha palabra, puede leerse en letras algo menores "con denominación de origen". Éste contraste aparente entre imagen y palabras se explica y matiza con el texto que aparece en el recuadro blanco en la parte inferior del cartel. De este modo, queda claro que lo que se "vende" es algo más que el vino de esa tierra: su gente, sus paisajes y la nostalgia de lo tradicional, que viene con denominación de origen a pesar de no entrar en lo gastronómico. La creación del neologismo "ribérate", verbo formado a partir de "Ribera", incita al público a acercarse a esa "ruta de las sensaciones con denominación de origen".

Al igual que en el caso anterior, nos encontramos ante un anuncio institucional en el que una imagen contrasta con un texto, en este caso una mano con un racimo de uvas sobre la que se lee "poesía con denominación de origen". En el recuadro blanco se puede leer una serie de enumeraciones sobre las propiedades de las uvas y las experiencias que a través de ellas se alcanzan o transmiten, culminando con la afirmación de que en la Ruta del Vino Ribera del Duero cada copa de vino es poesía. El efecto, aunque bello, podría haber estado mejor logrado de haber incluido algún verso de poesía de los muchos que hay en torno al Río Duero y su ribera.